Tecnologías Educativas

Tecnología y Educación

El avance tecnológico en distintos aspectos del mundo contemporáneo es un suceso que no podemos negar y que continuará en los próximos tiempos no lo podemos discutir.

La variedad de las nuevas tecnologías y su incorporación a la vida cotidiana ha influenciado notablemente a tal punto que han generado nuevos ambientes para una persona diferente.

Frente a esta situación, la educación como cualquier ámbito de la vida humana no puede permanecer ajena a estos cambios o transformaciones.

Un análisis de este fenómeno desde el campo de la educación y en particular desde la mirada de un docente, presupone una evaluación positiva. Hemos mejorado en distintos aspectos gracias a la Tecnología, pero también han surgido nuevos problemas e inconvenientes que son necesarios analizar.

Hoy no podemos educar sin tener en cuenta el contexto tecnológico en el que vive la sociedad. En esta línea de adecuar a las necesidades sociales, nos debe llevar a reflexionar sobre la Formación Inicial y Continua del Profesorado para incorporar disciplinas dentro del campo de la Tecnología Educativa.

Como profesionales de la educación debemos orientar y ayudar a nuestros alumnos a integrarse en una sociedad contemporánea donde la tecnología se ha incorporado a todos los ámbitos.

En este momento debemos evaluar la incorporación de la Tecnología Educativa desde distintos aspectos.

Desde una mirada de la comunicación y su relación con la educación, apreciamos que los cambios producidos están marcados por la aceleración del tiempo, nuevas tecnologías se incorporan produciendo desequilibrios en la sociedad sin la posibilidad de que la educación haya transitado tecnologías anteriores menos sofisticadas.

La educación ha recibido en forma notable el impacto de las nuevas tecnologías, la imposibilidad de adaptarse y de responder a estos nuevos desafíos se está poniendo de manifiesto. Mientras la población genera nuevos vínculos con la Tecnología de la Información y de la Comunicación incorporándola a la vida cotidiana, la escuela aún no ha podido acompañar con el mismo ritmo este proceso.

El desconocimiento de los docentes de las Tecnologías de la Información y de la Comunicación y de sus posibilidades didácticas orientan la necesidad de generar acciones entre las Ciencias de la Comunicación y las Ciencias de la Educación que puedan superar la fractura producida entre la Tecnología de la Información y de la Comunicación y su utilización como recursos didácticos para la educación.

El poco conocimiento del medio y la adquisición de nuevas tecnologías se confunde en muchas oportunidades con modernización de los procesos comunicacionales. Los resultados ampliamente conocidos en la educación han considerado que no se mejoran los logros y que se malgastan los recursos porque no se las incorporan enmarcadas en una propuesta educativa.

Por lo tanto, la Tecnología Educativa debe estar al servicio de la consolidación de la educación y por ende de la sociedad. La eficacia y la pertinencia de la propuesta educativa contribuirá a este afianzamiento.

Además, la Tecnología Educativa potencia acciones que posibilita que más gente aprenda mediante metodologías a distancia y que aprenda más mediante diseños presenciales teleeducativos y medios de comunicación social. Debe responder a las necesidades específicas e intereses de la sociedad en las cuales habrá de funcionar, ser pertinentes y ajustarse a variables políticas, económicas y sociales.

Pensar que la Tecnología Educativa sería una propuesta estratégica de innovación permanente y de superación de problemas cuantitativos y cualitativos de la educación formal y no formal es una ilusión, pero podemos afirmar que contribuirá al logro de mejores resultados.